A lo largo de mi dilatada experiencia (¡ja!) como director de rol, me he encontrado con muchos jugadores, todos diferentes en infinidad de virtudes y vicios. Sin embargo, con el paso del tiempo, he notado que todos encajan, quien más, quien menos, en tres categorías distintias. El que lea los titulares antes que el cuerpo (todo el mundo, vamos), las habrá adivinado. ¡Exacto! Me refiero al...
Y me parece una analogía bastante acertada, pues son las virtudes de unos las que "vencen" los vicios de los otros, aunque a mi parecer haya unos tipos mejores que otros. Todos hemos sido Piedra, Papel o Tijeras alguna vez, aunque uno de los tres aspectos suele imponerse a los demás. Echemos un vistazo a cada uno: